Sin duda estas 3 historias son mejores que el fasículo anterior que se puede considerar como una edición tributo por no ser original pero en cuyo caso pecó por no hacer ningún aporte real a la historia. En cambio aquí hay buena originalidad.
La primera historia nos presenta a Mortis en su papel de Parka, es una buena anticipación a todos los esfuerzos modernos y futuros por vencer a la muerte y cómo esta nos seguirá superando, engañando y llevando con ella. Es curioso como mezcla conceptos vampíricos en relación a la Parka, es una combinación interesante.
La segunda historia, es como la de Dorian Grey, sólo que en vez preservar la vida por un cuadro son las campanadas de un reloj, herencia del Maestro, del Siniestro Doctor Mortis, que a través de su pacto macabro logra este perfecto acto de brujería.
Pero es la tercera historia Chef de Cuisine la que me entretuvo más, y es curiosa porque en cierta forma es una historia que he visto en la tele a través de alguna de las seriales de terror. El gran valor de esta historia es que, similar a la primera, Mortis participa en forma activa, esta vez como Saint Rohm, acrónimo de este chef loco.
Pienso que el segundo tomo debíó salir más adelante, ya que estoy terminando el cuarto y veo originalidad, muy buenas ideas terroríficas, aunque siento la ausencia del desarrollo contínuo de algún plan malévolo superior. Creo que siempre Mortis debe actuar y no ser simplemente un espectador más del terror.
El Sibarel, aprendiendo a querer a Mortis