sábado, mayo 29, 2010

El Día


“Los cambios deben ser generados por cada uno de nosotros, por voluntad propia, sin esperar que los hagan los otros ni acontecimientos ajenos que nos obliguen”

El sonido del celular, que uso como despertador, me saca rápidamente de mi somnolente estado, estiro el brazo, mecánicamente y logro apaciguar ese detestable sonido. No es que me moleste ese sonido en particular, pero cualquier cosa que evite que siga sumido en el mundo de Morfeo y me haga despertar a las 6:30 AM, es detestable. Abro los ojos, levanto la cabeza y miro a mi alrededor esperando encontrar algo distinto, algo que no estuviera anoche cuando me acosté, pero es obvio que nada esta distinto, ya que vivo solo desde hace algún tiempo.


Después de realizar mi ritual madrugador, muy normal por cierto, a las 7:20 AM, enfilo hacia mi lugar de trabajo. La radio de mi auto se encarga de darme la temperatura, la hora y obviamente la fecha, 21 / 12 / 2012… ahora recuerdo lo que estuve pensando ayer antes de acostarme, se supone que hoy debe suceder algo extraordinario…a las once de esta mañana ¿Qué irá a pasar?, a lo mejor este el ultimo día de este planeta… o el primero de uno nuevo..mmmhhh.

En el camino veo a un par de personas con carteles en la calle, que aluden a este fecha, he estado hace años esperando a ver que pasaría hoy, me voy poniendo ansioso con el pasar de los minutos.

Son las 7:50 AM y voy entrando al estacionamiento de mi trabajo, me estaciono miro el reloj, y pienso – Y si este fuera el ultimo día …¿ Quiero estar en la oficina?...Ciertamente no, - Salgo del estacionamiento y voy en dirección de la salida, el guardia me mira intrigado y no sabe si saludarme o despedirse, estoy en la calle nuevamente. Y ahora ¿A dónde?

¿Que irá a pasar?, mientras conduzco, por cualquier calle, voy pensando en eso, ¿Dónde quiero estar el ultimo dia?, no tengo familia en Santiago, solo un hermano en el sur…- Lo voy a llamar-

Hable un par de minutos con él, parece que estaba un poco ocupado, se extraño que lo llamara, no me atreví a decirle cual era el motivo de mi llamada, pero lo salude y le mande muchos cariños a mis sobrinas y a su esposa.

Sigo manejando por las calles sin rumbo fijo, no se a donde ir, sintonizo la radio pasando de una emisora a otra, en una de esas escucho a una periodista, no tan en serio, hablar sobre el tema, dice que algunas personas se han ido a la montaña o a la playa a esperar la hora final…- Eeeeeso a la playa- Siempre me ha gustado, es lo mejor, creo que me gustaría estar sentado en la arena mirando el mar el último día.



Voy rumbo al Litoral Central, a Isla Negra, la playa del Poeta, un buen lugar, algo de mágico debe tener ese lugar.



Pasan los minutos, en el viaje he llamado a mis mejores amigos, y obviamente a mi mejor amiga, nadie entiende mucho que ando haciendo llamando en la mañana, pero no estoy para explicaciones.



Son las 9:15 AM en unos 40 minutos mas llegare a “mi lugar”, se me pasan por la mente numerosas posibilidades de lo que puede pasar; a lo mejor se abren los cielos y baja Dios…chiuuu… y existía…en el forrito que estaría meti’o, no me elige ni pa’ limpiar los baños… o empiezan los terremotos que duraran horas o plagas, que diezman la población y los sobrevivientes debemos…¿debemos?, obviamente que seré uno de ellos, debemos reconstruir el planeta bajo nuestras propias leyes,…….. o llegan los extraterrestres…¿ Para salvarnos o esclavizarnos?...Tambien puede venirnos la iluminación y nos convertimos todos en buenas personas o simplemente, el planeta , harto de aguantarnos, revienta y nos convertimos en polvo cosmico. ¿ Quien sabe…..?



Por fin llego, busco un lugar donde estacionarme cerca de la playa, camino hasta encontrarla, el dia nublado y frío a pesar de haber llegado el verano, en el lugar había unas decenas de personas, tenían pinta de hippies, vola’os, excéntricos, esotéricos, no se realmente, pero se veían contentos.



Uno de ellos me ve llegar y se me acerca, lo miro como con una mueca de sonrisa, esperando que me dijese algo- ¿Viniste a esperar?- me pregunta, asiento con la cabeza y le respondo –Pero todavía no se qué-, me palmotea la espalda y me invita a acercarme al grupo, los saludos a todos con un ademán con la mano, sin presentarme, no creo que les interesara saber mi nombre.



Muchos estaban conectados con celulares y computadores portátiles a Internet y los veía chatear o mandar y recibir mails, de vez en cuando uno de ellos contaba lo que recibía, -En la India se vieron escuadrillas de luces en el cielo-, decía uno, otro aportaba – Hubo un terremoto en Asia Central- , -Y hay erupción de un volcán en Japón- gritaba otro de mas lejos…



Se me acerca el que me invito a unirme y me trae un vaso con licor, lo acepto y agradezco, ya que no andaba muy abrigado y el frío estaba haciendo mella, además me ofrece de su pito de marihuana, también acepto, no voy a hacerme de rogar este día.



Aprovecho de preguntarle – A que hora se supone que es “la hora”…- medio en broma medio en serio,…. me mira, toma aire y con un tono casi solemne me responde -La “ Gran Hora”…acá en Chile como a la una de la tarde- No sabia que debía demostrar tras esa respuesta, no sabia si reírme o estar serio, preocuparme o resignarme, solo asentí con la cabeza y dije – Nos quedan un par de horas entonces- por suerte comenzó a sonar mi celular, me disculpe con la mano, he hice como que iba a contestar y me aleje un poco, era de la oficina, corte la llamada sin hablar, me quede unos segundos lejos del grupo, apague el teléfono, y me volví a unir.



Los internautas seguían haciendo saber sus descubrimientos, y todos, incluyéndome, nos enfervorizábamos cada vez más, tal vez el licor y la yerba tenían también algo que ver.



Después de mas de dos horas de compartir con estos desconocidos, solo con el desayuno y varios tragos y pitos a mi haber, me alejo un poco del grupo a sentarme en la arena y mirar el mar, alguien grita – ¡Quedan 5 minutos!- Levanto la vista miro el mar, lo notaba extrañamente “molesto”; así le decía cuando era niño y habían muchas olas, una bandada de pájaros se entraba hacia el continente, un rayo de sol se colaba entre las nubes y hacia un destello casi enceguecedor en el agua, alguien empieza a gritar una cuenta regresiva – 10, 9, 8,……..-, pongo ambas manos en mi cabeza, la escondo entre mis rodillas y cierro los ojos, la cuenta regresiva se me hace cada vez mas lenta y lejana, siento que la arena se mueve, el viento frío se termina y solo el silencio…, ya no hay mar…, ya no hay viento ………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………..



El sonido del celular me despierta, levanto la cabeza para escudriñar mi pieza, - Hayyyy que dolor…….-, la tremenda caña, poco me acuerdo de cómo llegue a la casa, me levanto voy a la ducha-Y hoy es la fiesta de Navidad de la oficina mas encima - Antes de entrar al baño enciendo el computador, después del desayuno listo para salir reviso mis correos, 14 mails sin leer, voy revisar solo los “Asuntos”; “ saludos”, “Donde estabas”, “Ofertas”, etcétera…uno llama mi atención “ Error 2012”, lo abro:



“Por un error de calculo en el inicio del Calendario Maya, al hacer la equivalencia con el calendario Bizantino y la no consideración de lo años bisiestos y bla, bla, bla, bla, bla,…………..El termino del Calendario Maya es 23 de Diciembre del 2022”



Ja, ja, ja, ja, la risa nervioso-burlona que se me sale y resuena en las paredes de la habitación y que se ríe de mi mismo, se apaga abruptamente – Chuuuuucha…y que cresta le voy a decir a mi jefe por que no fui a trabajar ayer-.














F I N